Me dí una ducha, me vestí y me dispuse a ir a casa de Andrea.
Al llegar la recogí, llegamos al restaurante y allí estaba, Samuel, apuesto y decidido.
Noté como Andrea soltaba mi mano y se dirigía con la mayor sonrisa que tenía hacia él. Se dieron un abrazo y empezaron a hablar y reír mutuamente, me acerqué y Andrea me presentó.
Andrea: Samu, este es Guille mi novio *dijo súper feliz y me besó ligeramente los labios*
Samuel: Eh..¡Hola! Encantado *dijo de una menera muy segura y elegante, nos dimos la mano*
Guille: Ah Hola, lo mismo digo. *respondí con una ligera sonrisa que él me devolvió*
Nos sentamos en la mesa pedimos la comida, hablabamos, hablabamos y nos reíamos sin parar. Estoy empezando a creer que mi novia no iba muy desencaminada respecto a que Samuel es perfecto, pero qué digo, creo que la comida me está afectando jajaja.
Terminamos y al pedir la cuenta Samuel insistió en pagar, como siempre muy caballeroso, pagó y decidimos irnos, al salir sonó un móvil, era el de Andrea. Tras colgar me dió un beso rápido y se marchó.
Andrea: Adiós, es urgente, luego nos vemos. ¡Pasadlo bien!
Cuando ella tomó un taxi y se fue yo no sabía que hacer, pero entonces Samuel me dirigió la palabra.
Samuel: Oye, Guille. *dijo en un tono burlón mientras sonreía ligeramente* ¿Quieres venir a mi casa a jugar?
Guille: ¿A jugar? *dije confundido tras contemplar su sonrisa, no sabía que me pasaba*
Samuel: Claro, a la play. No seas mal pensado anda *dijo riendose*
Continuara...
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